Proteínas

Las carnes rojas son una fuente privilegiada de proteínas, pero muchas de ellas abundan en grasas saturadas por lo que su consumo frecuente no es recomendable. En cambio los pescados y mariscos, igualmente ricos en proteínas, son reducidos en grasas saturadas y varios tienen un alto contenido de ácidos grasos Omega-3.